Eran las Navidades del 1997 y debajo del árbol surgió un regalo de dimensiones extrañas. Cuadrado y fino. Cuando lo desenvolvi; ¡resultó ser un libro!
Stelaluna, de Janell Cannon.
Una curiosa historia sobre una pequeña murciélago de la fruta que se pierde del lado de su madre y termina siendo adoptada (aunque temporalmente) por una familia de pájaros formada por mamá pájaro y tres polluelos de la edad de la propia Stelaluna.
¡Y os podéis imaginar la de aventuras que viven los jóvenes habitantes del nido y la de sustos qué se lleva mamá pájaro con la nueva recién llegada!
Stelaluna tiene que convivir con nuevas costumbres a las que no está hecha y a su vez pretende enseñar a sus nuevos amigos las suyas propias como dormir boca abajo o volar por las noches.
La historia a parte de ser infantil es también adapta para los más mayores, con un mensaje claro y preciso sobre el respeto y tolerancia a lo desconocido. O la aceptación y acogimiento de algo nuevo
Completan esta historia unas preciosas ilustraciones que ayudan al pequeño lector a seguir con la lectura, y una breve lección (escrita al final de sus páginas) sobre todo lo que uno debe saber de los murciélagos de la fruta.
Y vosotros, ¿habéis tenido el placer de leer esta maravillosa historia?, ¿recordáis cuál fue el primer libro que leísteis por vosotros mismos?
¡Abrazos amigos!
